Acceso Colaboradores
Código de Referencia: ES.9059.AMO/1.2.1.4
Título /Nombre Atribuído: Procesos de beatificación y canonización
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01-01-1954
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Nivel de Descripción: Serie
Historia Archivística: Algún original pero en su mayor parte copias, recopilados por el P. Silverio de la Biblioteca Nacional de España y el Archivo de la Congregación de Ritos (Archivo Secreto Vaticano) y algún convento para su edición en la colección Biblioteca Mística Carmelitana.
Historia Institucional/Reseña Biográfica:
Los procesos son de una doble naturaleza, jurídica por la autoridad que los instruye: en los ordinarios es la autoridad de los ordinarios del lugar o autoridad diocesana y en los apostólicos la autoridad pontificia delegada al tribunal.
Cada uno de los procesos ordinarios que se celebraba en un lugar era independiente de los realizados en otros lugares, aun dentro de la misma diócesis, en cuanto al tribunal y a los testigos presentados. En todos los procesos ordinarios se constituyó un tribunal eclesiástico que, con el procurador de la Orden, recibía los dichos de los testigos llamados a declarar. Fue común el Interrogatorio de la Orden y a veces el postulador. La estructura de cada proceso ordinario se repetía fielmente, pudiendo distinguir tres fases en las actuaciones: las sesiones preliminares, con las cuales se erigía el tribunal, se aceptaban los interrogatorios, etc.; el examen de los testigos presentados por la Postulación; y en tercer lugar las sesiones conclusivas y autentificaciones de las actas. Cada declaración de los testigos consta de dos series de respuestas: unas lo son al Interrogatorio de Oficio, preparado por el Obispado en cuya jurisdicción se hace el proceso, y otras responden al Interrogatorio de la Orden, preparado por la Postulación de la Causa. El Interrogatorio de Oficio consiste en cinco o seis preguntas sobre la persona y calidad del testigo, como nombre, profesión, edad, etc. La serie de respuestas al Interrogatorio de la Orden, que versan sobre la “vida, virtudes y milagros” del venerable son el meollo de las declaraciones.
Conclusos los autos se sacaban de ellos copias autorizadas por notarios, las cuales se remitieron a Roma a la Sagrada Congregación de Ritos (Archivo Vaticano), y las informaciones originales se guardaron al principio en casa de los notarios, y luego se dieron a los conventos que en la población donde se habían hecho los procesos tenía la Orden. Algunos de estos procesos fueron a parar al Archivo Generalicio de la Orden en Madrid.
A diferencia de los Procesos Informativos o Procesos Ordinarios, que eran celebrados a iniciativa de la Postulación de la Orden, pero bajo la autoridad del ordinario del lugar, de ahí su nombre, el cual señalaba los miembros del tribunal y aprobaba los interrogatorios de oficio y de la Orden usados; los Procesos Apostólicos, promovidos igualmente por la Postulación de la Orden, eran cometidos directamente por la Sede Apostólica, de ahí su nombre, a los ordinarios de algunas diócesis mediante las Letras Remisoriales, emitidas por la Congregación de Ritos con explícita aprobación pontificia. Los ordinarios del lugar no podían iniciarlos por autoridad propia, sino que la Congregación de Ritos establecía las sedes, nombraba los miembros componentes del tribunal, remitía ya aprobados los interrogatorios de oficio y de la Orden que se habían de seguir y daba las normas de procedimiento en todas las actuaciones, hasta la conclusión y devolución a Roma de los procesos fabricados, una vez sellados y firmados. De esta manera las actuaciones se hacían, no por autoridad del ordinario del lugar, sino por autoridad de la Sede Apostólica.
El texto de las Remisoriales es el mismo para todas las sedes, aunque varía el encabezamiento en función de la sede o lugar y de los jueces componentes del tribunal, a los que se nombra explícitamente por el cargo eclesiástico que ocupan, como eran el Obispo, el Vicario General, etc. E insertos en las Remisoriales se les envía el Interrogatorio de Oficio, preparado por el Santo Oficio, para examinar a cada testigo sobre sus particularidades personales y el Interrogatorio de la Orden, preparado por la Postulación, por el que han de ser interrogados en torno a la “vida, virtudes y milagros” del venerable, y les pide que actúen con diligencia y rapidez.
Con la emisión de las Letras Remisoriales concluía la acción en la Congregación de Ritos y se devolvía la iniciática a España. La Orden expide a varios padres las patentes de postuladores de la causa en las diversas sedes, para que pudiesen comparecer ante los ordinarios correspondientes e hiciesen los autos y diligencias necesarias para promover el Proceso Apostólico. Así lo hicieron los postuladores encargados por el General de la Congregación de España.
Los procesos fueron remitidos a Roma y aceptados en la Congregación de Ritos.
Cada uno de los procesos apostólicos que se celebraba era independiente de los realizados en otros lugares, aun dentro de la misma diócesis, en cuanto al tribunal y a los testigos presentados; fueron comunes sin embargo el texto de las Letras Remisoriales, el Interrogatorio de Oficio y el de la Orden. El proceso está constituido por cuatro clases de documentos: primeramente la serie de actas de trámite, como son la constitución del tribunal, el nombramiento de notario, convocatoria de los testigos, clausura de los procesos, firmas, etc.; en segundo lugar, las declaraciones de los testigos vivos presentados por la Postulación, convocados a testimoniar sobre la “vida, virtudes y milagros” del venerable; además puede haber, a petición de la Postulación, la transcripción de algunas declaraciones hechas en los Procesos Ordinarios por testigos ya difuntos e incluso se transcriben procesos completos “in specie” sobre algún milagro; por último hay procesillos particulares “in specie” ya sobre la veracidad de los testigos difuntos presentados por la Postulación ya sobre la autenticidad de los documentos que el Postulador pide que se inserten en el Proceso Apostólico.
Cada declaración de los testigos consta de dos series de respuestas: unas lo son al Interrogatorio de Oficio, preparado por el Santo Oficio, y otras responden al Interrogatorio de la Orden, preparado por la Postulación de la Causa. El Interrogatorio de Oficio consiste en una serie de preguntas sobre la persona y calidad del testigo, como nombre, edad, profesión, rentas, etc. Y la serie de respuestas a las preguntas del Interrogatorio de la Orden que versan sobre la “vida, virtudes y milagros” del venerable.
Forma de Ingreso: OTROS
Observaciones del Ingreso:
Nombre del/los productor/es:
Alcance y Contenido: os procesos de beatificación y canonización son la fuente más copiosa y segura de información biográfica e histórica de los santos ya que aportan un sinfín de datos geográficos, cronológicos, biográficos, bibliográficos, etc. sobre los mismos.
Valoración, Selección, Eliminación:
Nuevos Ingresos:
Organización: La documentación no está agrupada físicamente, sino que está mezclada con los demás fondos del archivo. Existe cuadro de clasificación.
Condiciones de Acceso: Acceso restringido con autorización
Condiciones de Reproducción: Con fines de estudio e investigación
Lengua/escritura(s) de los Documentos: Mayoritariamente en castellano
Características Físicas y Requisitos Técnicos:
Estado Conservación: Bueno
Observaciones Conservación:
Índices de Descripción:
Instrumentos de Descripción:
Existencia y Localización de los Originales:
Existencia y Localización de las Copias:
Unidades Relacionadas por Procedencia:
Otras Unidades Relacionadas:
Notas de Publicaciones:
Notas:
Control de la Descripción - Notas del Archivero: Mª Lourdes Fernández Ruiz
Control de la Descripción - Reglas o Normas:
ISAD(G) 2ª ed. "Norma Internacional de Descripción Archivística" (2000).
ISAAR (CPF) "Norma para la elaboración de puntos de acceso normalizados de instituciones, personas, familias, lugares y materias en el sistema de descripción archivística de los Archivos Estatales" (2010)
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